Aguilar de la Frontera

AGUILAR DE LA FRONTERA

UNA BODEGA CENTENARIA Y UNA PLAZA OCTOGONAL QUE NO HAS VISTO NUNCA

Si pudiéramos ver Aguilar a vista de pájaro nos sorprenderían desde las alturas su gran plaza octogonal y las ruinas del Castillo y cómo esta ciudad está rodeada de viñas, olivos y otros cultivos que conectan la ciudad con el campo.

La visita, desde el punto de vista enoturístico, no puede ser más agradecida. Este es el lugar donde se enclava una de las bodegas más atractivas y centenarias del marco Montilla-Moriles, Bodegas Toro Albalá, donde además en la Sala de Catas, que puedes visitar, en la bodega, se muestran numerosos documentos de la cultura del vino, obras literarias, arqueología o pintura, una de las pocas bibliotecas monográficas en torno al vino que existen en España.

Después, puedes darte un paseo por la curiosa plaza de San José (1803), con su peculiar forma octogonal, o ascender hasta las ruinas de su castillo medieval. Tampoco hay que perderse la Torre del Reloj, de estilo barroco obra de Juan Vicente Gutiérrez de Salamanca, a quien se debe también el diseño de la plaza de San José.

Numerosas casas señoriales salpican toda la localidad, y una de las más conocidas es la casa de Las Cadenas o Casa palacio del Marqués de Vargas, que aunque no puede visitarse su interior, muestra en su fachada de piedra unas cadenas que le han dado nombre.

Pero también cuenta Aguilar con edificios religiosos como la Iglesia de Nuestra Señora de Soterraño, la más antigua de la ciudad levantada, según la leyenda, sobre una cueva en la que se dice que apareció la Virgen y en la parte exterior de los muros del castillo de Bulay o Poley. Se trata de un edificio de 1530, de Hernán Ruiz I en estilo gótico-mudéjar en cuyo interior se guarda la imagen de la patrona de la localidad, Nuestra Señora del Soterraño.

Para los amantes de los entornos naturales, también es destacable La Laguna del Rincón, en dirección a Puente Genil, a unos 3 km dentro del término municipal, a la que se accede por la carretera de Moriles. Y siguiendo la carretera de Puente Genil a Jauja, se encuentra el Paraje Natural de Cordobilla.