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Texto: Mara de Miguel @bymarademiguel  |  Fotografía: Andreína Contreras  |  Foto de portada: Ambiente de la exposición Con Nombre de Mujer.

Tiempo de lectura: 10 minutos

La exposición «Con Nombre de Mujer» recorre la historia del vino de Montilla-Moriles a través de 20 etiquetas de vino, vinagres, anís y un pacharán, y que podrás visitar en la Sala Arpillera de la Diputación de Córdoba hasta el próximo 30 de abril.

«Con nombre de mujer». Con este sugerente título, la exposición organizada por la Asociación de Sabores de Córdoba, recalca la importancia de las féminas en el mundo del vino de Montilla Moriles.

Y es que esta exhibición, que estará hasta el día 30 de abril en la Diputación Provincial –Sala de La Artillera– pretende poner en valor y hablar de esas mujeres extraordinarias que inspiraron a las bodegas, para terminar siendo nombre de un vino, en forma de homenaje líquido.

La memoria viva del vino Montilla-Moriles - We Love Montilla Moriles

Durante la presentación de la exposición se realizó una cta paralela de cuatro de estos vinos.

Y es que, aunque no reparemos en ello, las etiquetas de los vinos cuentan historias. Es una información que atrae al consumidor y forma parte del valor añadido de cada vino, hecho historia líquida.

Tradicionalmente los nombres se inspiraban en la bodega, el viñedo, o la finca de la que provenían, en la familia que lo elaboraba o incluso en algún personaje histórico. Pero, en los últimos años se ha pasado al extremo contrario y las etiquetas buscan llamar la atención del consumidor con nombres como “El novio perfecto”, “La bicicleta voladora”, o “Cojón de gato”.

Le Vin Violette. Cosecha de mujeres libres - We Love Montilla Moriles

En el catálogo de la exposición, editado por la Diputación de Córdoba, se cuenta el porqué del nombre, quién diseña la etiqueta y el estilo de vino.

Por otro lado, hay otras etiquetas con auténticas historias detrás que además tienen nombre femenino. En esta muestra, se han seleccionado 20 etiquetas de las que se puede beber, con nombre de mujer.

Algunas son nombres propios, como Amalia, y otras sin embargo, forman parte de la memoria colectiva que se ha ido forjando a lo largo de los años. O si no, que se lo pregunten a los cordobeses, si han catado o al menos conocido a Pily –que da nombre a Pilycrim, de Bodegas– durante las últimas 32 primaveras, símbolo del Mayo cordobés.

Mujeres protagonistas de la memoria viva del vino Montilla-Moriles - We Love Montilla Moriles

A la inauguración asistieron numerosas mujeres vinculadas con estas historias del vino.

En esta exposición, junto a la etiqueta, se puede leer un texto de quién fue esa mujer, con historias tan fascinantes como la de La Tía Sabina, de Bodegas Alvear, posiblemente una de las mujeres más cultas de la época y muy vinculada al mundo del vino, que impulsó Montilla; o la historia de cómo la Abuela María, de Bodegas Delgado, ideó beber vino en su barbería de manera que después de sacarse una muela, tomaran un trago, o la etiqueta rescatada de Bodegas Campos, que fue pintada por la artista naif y bailaora, La Chunga.

Mujeres extraordinarias que inspiraron a las bodegas del vino Montilla-Moriles - We Love Montilla Moriles

Si cada botella contiene un paisaje, cada etiqueta habla de una familia, y en este caso, de sus mujeres.

ENERGÍA FEMEMINA AL PODER

La inauguración, el pasado 16 de abril, reunió a más de un centenar de personas, muchas de ellas mujeres, en un ambiente especial, donde se cataron 4 vinos o 4 etiquetas, de todas las que se mostraban en la exposición.

Y es que la idea de esta muestra es visualizar a esas mujeres luchadoras pero también dulces, como Dulce Fabiola, de las ya desaparecidas Bodegas Montulia, con el vino que lleva su nombre y recibir el testigo, para apreciar más el vino, al visualizarlo.

exposición organizada por la Asociación de Sabores de Córdoba - We Love Montilla Moriles

Amalia es un nombre que aún se mantiene vivo en la familia de Bodegas Pérez Barquero, y en sus etiquetas.

Para la ocasión, se serigrafiaron catavinos conmemorativos, para disfrutar de la cata dirigida, en una versión distendida, a lo largo del evento, que contó con muchas sorpresas y visitas de tataranietas, como las descendientes de la propia Amalia, que por cierto, siguen llevando ese nombre tan presente en sus vinos, como Viña Amalia, de Bodegas Pérez Barquero, o de la Abuela María, venidas para la ocasión desde Madrid o Sevilla.

Además, estas mujeres van a dar la vuelta al mundo, o mejor dicho a la provincia, puesto que cuando termine el tiempo de la exposición en Córdoba, la muestra visitará varios municipios de la provincia, e incluso, otros municipios fuera de Andalucía, que ya se han interesado por este legado.

 

Si quieres ver el catálogo:
Te lo dejamos en el siguiente link!

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